La Filosofía Igualitaria y los “Ismos” del Pensamiento Cruceño

Por: Lic. Carlos Hugo Barbery Alpire, ECONOMISTA.

Conferencia sobre: Pensamiento Político y Filosófico Cruceño: 450 años de Historia, realizado en la UPSA por la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, a través del Dr. Fernando Nuñez Jimenez. 20-Abr-2011

En primer lugar, manifiesto mi profundo agradecimiento al Dr. Fernando Núñez por invitarme a participar de tan importante actividad en beneficio de la comunidad y darme el honor de permitirme compartir la testera con destacadas personalidades.

Cuando el Dr. Fernando Núñez me hizo llegar la invitación para participar en las “XVI Jornadas Jurídicas UPSA, Pensamiento Político y Filosófico Cruceño: 450 años de Historia”, gracias a la exposición que realicé en ocasión de la presentación de mi libro sobre el Movimiento Igualitario(1), preparé una presentación en diapositivas para ilustrar de manera más agradable a los presentes.

Sin embargo, ya en el desarrollo del tema y luego de haber escuchado las intervenciones de mis compañeros de testera, Isaac Sandoval, Gustavo Pinto y Luis Andia, consideré que sería desperdiciar una excelente oportunidad compartir únicamente lo referido a la filosofía igualitaria, sin participar al auditorio mis puntos de vista sobre todos los aspectos a los que se hizo alusión.

Empezaré, a manera de introducción y complemento a lo que mencionaron los otros amigos de la testera, enfatizando en dos hechos históricos ocurridos por la época de la mismísima fundación de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra y que si bien para entonces “lo cruceño” apenas comenzaba a dibujarse geográficamente, a criterio personal ya muestra los primeros vestigios de esa forma de ser que se configuraría en la estirpe de los hijos de este rincón de la América Morena, el espíritu emprendedor y luchador en busca siempre de forjar su propio destino.

El primer hecho a que hago referencia es justamente el ocurrido en los alrededores del Río Parapetí (o Parapití o Condorillo), en ocasión de la disputa por los territorios entre Andrés Manso y Ñuflo de Chaves, era tal la visión del Gran Capitán que imprime su viaje a Lima, en compañía de Andrés de Cañizares, uno de los lugartenientes de Manso, que luego de varios meses de camino llegan a su destino para solicitar resolución del Virrey de Perú, el Marqués de Cañete don Andrés Hurtado de Mendoza, quien resuelve el conflicto a favor de Ñuflo de Chaves, creando así la Gobernación de Moxos en 1560, cuyo Gobernador sería su hijo García Hurtado de Mendoza y nombra a Ñuflo de Chaves como Teniente de Gobernador con todas las atribuciones, en tanto ejerza el Gobernador designado y la primera atribución, fundar la ciudad capital del nuevo y vasto territorio de casi dos millones de Km2. Hecho que ocurriría precisamente un año después, en 1561, en las inmediaciones de las serranías Turubó y Riquió y a las orillas del arroyo Sutós en plena tierra chiquitana.

El segundo hecho al que hacemos referencia es precisamente al primer cabildo electivo de la autoridad del gobernador de estos territorios, precisamente cuando luego del asesinato de Ñuflo de Chaves en manos de los Itatines, asume el mando por mandato del pueblo su cuñado y fiel compañero Diego de Mendoza, quien gozaba plenamente, además de la legitimidad del mandato del pueblo, de la legalidad que le otorgaba la Cédula Real de 1537. Sin embargo, con engaños sería conducido hasta Potosí, donde fue asesinado en 1575, justamente porque sus actos gubernativos y la forma de su ascensión al cargo era una actitud que no iba en paralelo con las acciones de quienes gobernaban en las alturas.

Ahora nos centraremos en la explicación de la Filosofía Igualitaria y para ello tenemos que empezar por la figura de Andrés Ibáñez, abogado y político cruceño que desafió a las estructuras establecidas tanto en Santa Cruz como en el país entero, con la visión de la Igualdad entre los ciudadanos, ideología que se desprendía de los albores de la Revolución Francesa que había ocurrido casi 100 años antes y que se convertiría, a decir de muchos historiadores, en la semilla de la revolución social de América del Sur.

Hay que preguntarse entonces, cómo en aquella ciudad mediterránea se llegan a reproducir estas ideas revolucionarias? Es que existía nomas un comercio de libros de toda data, que los pensantes leían y proponían cosas mejores para la pobreza de aquellos tiempos, es precisamente la conclusión a la que llega el Dr. Mario Suárez Riglos, al momento de prologar gentilmente mi obra.

Esos aires cruceños venían con fragancias parisinas, las ideas revolucionarias de Jean Jacques Rousseau inicialmente y de Pierre Joseph Proudhon, con el Contrato Social o la trilogía de Igualdad, Libertad y Fraternidad, se trasladarían casi un siglo después a este rincón del mundo, que para entonces tenía apenas 10.000 almas, en lo que sería el mensaje de Andrés Ibáñez, “Todos Somos Iguales”, consigna que impulsaría con un gran apoyo popular, básicamente de artesanos, talabarteros y trabajadores de las estancias ganaderas y agrícolas de la región.

Pero, por qué ese eslogan de la igualdad tendría tanta aceptación y adeptos que llevarían a Andrés Ibáñez a investirse en los cargos, tanto de Diputado Nacional por Santa Cruz como de Prefecto?

Empezaremos mostrando cuál era la realidad socioeconómica y legal de aquellos años del último cuarto del siglo XIX, pues de los aproximadamente 10.000 habitantes, sólo un pequeño porcentaje tenía derecho al voto, ya que éste se encontraba restringido sólo a los varones, siempre que tuvieran un determinado nivel de ingresos, por lo que la masa trabajadora estaba imposibilitada de ejercer aquel derecho.

Además de ello estaban restringidos en sus libertades básicas por la misma Ley de Contrataciones de 1826, que reconocía la libertad de los trabajadores, pero que a su vez los declaraba deudores de su empleador en el monto de su última compra, el cual deberían pagarle con trabajo, que era remunerado con 30 pesos anuales y además el monto de su deuda no podía ser conocido, constituyendo una libertad en los papeles, pero una esclavitud en la práctica.

Naturalmente, este tipo de propuestas – Movimiento Igualitario – atentaba directamente a los beneficios de los que gozaba la clase dominante de Santa Cruz, ya que afectaba a los tres factores productivos de los que aprovechaban prácticamente a título de nada, pues la libertad de los trabajadores implicaba ofertarles por su trabajo un salario digno, la igualdad en la propiedad implicaría que podrían ver reducidas sus extensiones territoriales y finalmente reducidos sus patrimonios, por lo que de manera inmediata sería catalogado – Andrés Ibáñez – como un traidor a la Patria y un revolucionario que destruiría la base de la economía de entonces, asentada sobre el principio del latifundio.

Estos postulados le permitieron – a Andrés Ibáñez – obtener gran apoyo popular que lo llevó a ser electo inicialmente Diputado Nacional por Santa Cruz, haciendo un excelente papel en el Congreso Nacional con muchas propuestas innovadoras y finalmente electo Prefecto del Departamento.

El tener esta investidura era aún más peligroso para quienes veían peligrar sus intereses y por eso tejieron toda una estrategia de desprestigio y falsedades ante el gobierno nacional, que ante todo ese panorama instruiría su apresamiento y finalmente su asesinato en las selvas de Chiquitos, gobierno nacional al que inclusive en la figura del Gral. Hilarión Daza apoyaría en las elecciones de 1876.

La idea del Federalismo, consolidada con la creación de la Junta Federativa Superior del Estado Oriental, de la cual Ibáñez fue Ministro de Hacienda, se constituiría en una postura reaccionaria ante las decisiones del gobierno que no reconocía la legitimidad de Ibáñez, y es esta parte de su movimiento, es decir la federal, la que utilizan siempre los movimientos de las esferas políticas cruceñas para ensalzar la figura de Andrés Ibáñez, dejando de lado la esencia de su ideología, la igualdad.

Finalizamos esta síntesis sobre la Filosofía Igualitaria indicando que es a nuestro entender el primer “Ismo” que se consolida sobre el pensamiento cruceño en la era de la República.

Ahora pasaremos a señalar nuestra ponencia sobre algunos criterios que han mencionado mis compañeros de testera y que consideramos importantes en esto que hemos denominado los “Ismos” del pensamiento cruceño. Pero por qué ese denominativo? Pues por la sencilla razón que en el transcurrir de los años y dependiendo de la coyuntura que vivía el país, los adjetivos de: Regionalismo, Separatismo o hasta Terrorismo, han sido vertidos sobre los pronunciamientos o postulados emanados desde esta región, independientemente de las personas que coyunturalmente hayan ejercido determinado cargo institucional. Sin embargo, todos estos planteamientos a lo largo de la historia determinaron un beneficio para todo el país, pese a que las diatribas y el costo social fueron asumidos únicamente por nuestra región.

Así fue que en 1904 se apuntó a los miembros de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz, cuando plantearon la necesidad del desarrollo del oriente y la salida al mar a través del Atlántico por el río Paraguay y 20 años después el Gobierno de Bautista Saavedra, al pedido de “Ferrocarril o Nada”, respondiera que “Nada”, bajo la conjetura que el día que los cruceños se desarrollaran, querrían separarse de Bolivia.

Unos años más tarde tuvo que ser un ente externo, a través del “Plan Bohan”, el que confirmó la imperiosa necesidad de mirar hacia el oriente para avizorar el desarrollo del país, dando razón a lo que años antes habría planteado la hoy centenaria institución.

Y así vinieron las luchas por las regalías, que a 20 años de la promulgación de la respectiva Ley por el presidente Busch, Santa Cruz no recibía nada de esos recursos, esta lucha que significó nuevamente un “Ismo” a esta región, trajo muertes que escribieron con sangre otra página de la historia. Los recursos al final llegaron y fueron administrados por el Comité de Obras Públicas y posteriormente por Cordecruz; nuevamente lo curioso es que este tipo de instituciones se propagaron en cada departamento de Bolivia.

También las grandes transformaciones estructurales surgieron desde estas latitudes, mediante Ordenanza Municipal 31/84, el alcalde Oscar Barbery convocó a elecciones para alcalde de Santa Cruz, generando así un hecho histórico aunque al mismo tiempo un nuevo “Ismo” en el haber para Santa Cruz, ahora los más de 335 alcaldes se eligen por voto.

Así siguieron, la Descentralización Administrativa y la Participación Popular generando nuevos “Ismos” sin embargo habría que preguntarles a los muchos alcaldes que empezaron a recibir recursos y hacer gestiones que opinan ahora.

De esa manera transcurrieron todos los movimientos, hasta llegar a la elección de prefectos primero, convertidos luego en gobernadores, con la envoltura de la lucha autonómica, otro “Ismo” embalsamado desde el oriente y que ahora se irradia en toda Bolivia.

Lamentablemente toda una lucha se reduce hoy por hoy a una ley cuya utilidad hasta el momento sólo ha servido para remover del cargo a autoridades electas que no profesan la ideología del partido de turno, afirmación que se respalda en que de nada sirve un dibujo autonómico legislativo si no está inyectado con los recursos que se requieren para precisamente hacerle frente a la estructura de competencias que deben asumir y eso es palpable porque a la fecha no se conoce el rediseño fiscal que garantice aquello.

“Pretender que una autonomía funcione sin recursos, es como tratar que el cuerpo humano viva sin sangre”.